STREET FIGTHER IV: LAS RAZONES DE UNA NUEVA ACTUALIZACIÓN

No ha pasado tanto tiempo desde que Capcom anuncio una nueva actualización de Street Fighter IV (sí, otra vez). Es algo raro suponiendo que la misma compañía había admitido que con la entrada de Arcade Edition se cerraba el cuarto capítulo, y realmente esa fue la intención, al menos hasta la sucesión de inesperados eventos.

Se dieron tan pocos detalles de la actualización que solo es posible confirmar un reequilibrio. La aparición de nuevos personajes, escenarios, pruebas, trajes, modos de juegos, etc, es un total misterio, así como los motivos del porque esta impensada decisión que sorprendió a muchos (Capcom siempre da pistas a la hora de anunciar o actualizar un juego).

Neithan, de la web francesa Bas Gros Poing, hizo un interesante artículo sobre este asunto, cuyo principio parece muy simple: Capcom exprimiendo excesivamente a sus sagas, lo cual muchas veces termina siendo cierto, pero viéndolo desde una perspectiva más abierta y global, el resultado es diferente y revelador.

Debo decir que fue un artículo complicado de traducir, no puedo asegurar un 100% de fidelidad debido a las dificultades que tuve. De todas maneras hice un gran esfuerzo por entender el mensaje y adaptarlo a nuestra lengua.

Enlace al artículo original aquí.

Seguramente habrá puntos en los que estarás de acuerdo con el texto y otros en los que no, así que no tengo más que decir que te pongas cómodo y disfrutes de la lectura.

STREET FIGTHER IV: LAS RAZONES DE UNA NUEVA ACTUALIZACIÓN

El anuncio de una actualización de Street Fighter IV sorprendió a más de uno. ¿Cuál es la lógica de actualizar un juego que no vende más? Esta es la cuarta actualización de un título que tuvo ventas muy buenas y que en la actualidad sigue siendo jugado por una minoría de expertos por medio del online. Algunos dicen que es por amor a la comunidad, una toma de conciencia a las incesantes demandas de los fans. No somos tan optimistas respecto a esto, Capcom no es una sociedad filantrópica y si hace algo es por algún beneficio. Este es un pequeño recorrido por las razones que mueven a Capcom a volver a su título estrella.

Una historia de base

Las continuaciones y actualizaciones de los videojuegos siempre venden menos que los originales. El primer Street Fighter IV vendió 3,5 millones de copias, cuando en Capcom nadie creía que el juego pudiera llegar a tales cifras. En total la sub-saga Street Fighter IV en su conjunto ha vendido más de 6 millones de copias. ¿Es bueno esto? En parte si para un género que venía en capa caída, y en parte no si nos fijamos en otros títulos de éxito de la compañía: Street Fighter II solo en Super Nintendo vendió 6,3 millones, Resident Evil 5 en Playstation 3 y Xbox 360 supero los 6 millones de unidades, con la segunda y sexta entrega de la franquicia por detrás, teniendo menos conversiones en plataformas. Y ni hablar de Street Fighter II Turbo para Super Nintendo con sus más de 4 millones, aun siendo una actualización mientras que Super Street Fighter IV llego a los 1,8 millones y su versión portátil de Nintendo DS a los 1,1 millones.

Lo primero que debemos saber acerca de Street Fighter IV es: actualmente es el juego de lucha con mayor base establecida. En comparación con otros títulos, Mortal Kombat vendió 3,5 millones de copias (en sus versiones para las consolas de Sony y Microsoft, DLC por separado), Marvel vs Capcom 3 llego a los 2,1 millones (su actualización Ultimate no alcanzó el millón, aunque Capcom USA declaro que las ventas cubrieron en parte las previsiones iniciales), y el pobre Street Fighter X Tekken sólo cosecho 1,4 millones en su iteración 2012. Nos detendremos en este último juego.

Cross Fail

Street Fighter X Tekken era, tanto para Capcom como para muchos jugadores, el relevo de Street Fighter IV. Ciertamente el juego utilizaba muchas partes de Street Fighter IV (motor gráfico, más de la mitad del casting de luchadores) pero aún así su costo fue una considerable cantidad de dinero. Por un lado porque se crearon numerosos personajes y del otro por la ambiciosa promoción que lo rodeo. Recordemos que Ono y Harada dieron la vuelta al mundo, se hizo un cortometraje con actores reales, el torneo por los 25 años de Street Fighter con sus 500.000 dólares en donaciones y todo lo demás: folletos publicitarios, presentaciones nocturnas, promoción en diversos y variados canales, etc ...

Cuando estalla el escándalo por el contenido oculto en el disco (gemas, personajes, trajes, colores) y el mundo comprueba el pobre acabado general del juego (bugs por doquier), las ventas colapsan. Capcom reconoce que hubo un buen inicio en ventas, pero éstas cayeron abruptamente. También fue un desastre en términos de marketing y relaciones, que no hicieron más que arruinar todos los esfuerzos de promoción que se habían hecho hasta el momento. La hospitalización Ono fue el punto culminante, y al final Capcom promete un parche para reiniciar/relanzar el juego, y lo más importante, que sería gratis. "Todavía puedo ser feliz" dijeron algunos, excepto que Capcom no hace nada gratis.

Los parches no son regalos

Arcade Edition 2012 jamás hubiera existido 10 años atrás sin las redes sociales. Incluso 5 años atrás nadie hubiera pensado en criticar al productor de su juego favorito para que lo modificara. Con la apertura de Capcom hacia su comunidad por medio de Capcom Unity, la llegada de Twitter y la libertad que se le ofrece a la gente el poder expresarse sin intermediarios, nos encontramos ante una situación delicada. El primer revés de Ono fue obviamente con Arcade Edition y su cuestionable equilibrio, forzándolo a prometer un parche gratuito durante el EVO 2011. ¿Filantropía de Ono? En lo absoluto, es en especial a los insultos recibidos por Twitter que dañan la imagen de la compañía, además de que se hallan en preparación de Street Fighter X Tekken. ¿Cómo vender un nuevo juego de lucha si el anterior tiene mala publicidad?

A pesar de que los jugadores se atribuyan una importancia exagerada, debe entenderse que el parche de Arcade Edition 2012 fue más que nada una decisión política y económica. Una forma poco costosa (relativamente hablando, lo veremos a continuación) de devolverle la confianza a un público que en pocos meses iba a cambiar de juego. Street Fighter X Tekken también tuvo un frágil equilibrio, y esa misma lógica empujo a Capcom a actualizarlo meses después. El propósito de los parches es, ante todo, que los juegos vendan, no complacer a una micro-comunidad formada por unos pocos miles cuando hay millones de potenciales compradores. Street Fighter X Tekken 2013 no es malo, aún es muy bueno. Pero tenía un defecto muy difícil de corregir: su base se había reducido al ridículo y por consecuencia sufre de un déficit de imagen.

Es por esto que Capcom vuelve a Street Fighter IV: debido a que Street Fighter X Tekken es un hervidero y un precipicio financiero. La no adopción como título estrella en las competiciones hizo que el juego no se vendiera a largo plazo y sus DLC no sean comprados masivamente. Como se dijo antes, incluso Ultimate Marvel vs Capcom 3 salió el mismo año en que la primera versión alcanzara sus objetivos de ventas, y esto es probablemente por la popularidad de los juegos competitivos, la marca Marvel y la disminución en los precios.

¿Y porque no volver a Marvel vs Capcom? Porque su base es la mitad de lo que es Street Fighter IV, Capcom ya no dispone de los derechos para hacer un nuevo juego, el fin de su contrato con Marvel fue una de las razones que la obligaron a sacar tan rápido la versión Ultimate. En resumen si hay un solo juego con una amplia base de jugadores, que no genera problemas de derechos y que no tampoco tiene mala imagen, es Street Fighter IV.

¿Y Darkstalkers?

El gran desconocido. Todo lo que sabemos sobre el juego es que su desarrollo comenzó poco después de Street Fighter X Tekken, o finales de 2011, utilizando el mismo motor gráfico. En la última Comic Con, Ono mostro un tráiler pero aclaro que se trataba de un vídeo para motivar a los miembros del equipo directivo para que se interesarán en la serie. En posteriores entrevistas no escondió su deseo de ver un nuevo capítulo que se situará más cerca de Hunter (y de Street Fighter) que de Savior, y que debería simplificarse para que fuera más atractivo al público.

Una actualización de Street Fighter IV podría tener sus razones, pero imaginamos que la pretensión es restablecer la confianza como lo hicieron con el parche Arcade Edition 2012, y de paso volver a la actualidad hasta tener algo nuevo que mostrar. A Capcom no le gusta dejar el terreno libre a los demás. En el año 2011 apuro el lanzamiento de Marvel vs Capcom 3 pocos meses antes de la salida de Mortal Kombat.

Si Darkstalkers (u otro juego) no es anunciado en el E3 o en el peor de los casos, en la Comic Con de San Diego, podemos ponerle fin a esta generación de consolas. Capcom dio a conocer su nuevo motor gráfico y no sería una sorpresa que el desarrollo de Darkstalkers, cuyo apartado gráfico necesita de mayor potencia que el de una Playstation 3 o Xbox 360, se retrasase hasta la siguiente generación. Y quizás un hipotético Street Fighter V (o 5) vea la luz con los gráficos deseados por Ono, algo que las actuales consolas no pueden correr.

En todo caso esta nueva actualización no es un "regalo a los fans ", sino un deseo de ocupar un lugar en la actualidad y no perder a los jugadores. Y para esto es mejor centrarse en un título con una rentabilidad más que probada.

Street Fighter IV y el control en los costes

Antes de hablar sobre la nueva actualización, volvamos a la lógica de la rentabilidad de Street Fighter IV.

Cuando fue lanzando en consolas, Street Fighter IV había recuperado parte de su inversión por la versión arcade. Éstas unidades fueron vendidas a un precio de 6.000 dólares por jugador (12.000 dólares para 2 jugadores...), consiguiendo bastante éxito y permitiendo cubrir los costos iniciales de desarrollo: motor de juego creado por Dimps, múltiples prototipos (sin hitboxes), creación de una técnica que adaptará personajes desde las 2D a las 3D. Street Fighter IV vende muy bien en consolas y da los suficientes beneficios para compensar años de desarrollo.

Super Street Fighter IV recuperó lo que no se había terminado en Street Fighter IV (en especial T. Hawk y Dee Jay), se rediseñaron los menús y se añadieron algunas opciones, sin llegar a ser un gasto mayor porque lo demás, como el motor de juego y la investigación, se había hecho anteriormente. Lo que costo dinero fueron los personajes, ya que como bien explicaron los desarrolladores de Skullgirls, la creación de algunos personajes de Street Fighter IV superó el millón de dólares, siendo T. Hawk el más costoso de todos.

Y llegamos a Arcade Edition. Esta versión es probablemente la más barata: por un lado acumula todo lo de la versión Super, sus nuevos personajes tienen poco presupuesto. Yun y Yang fueron desarrollados como un solo personaje, y al ser originales no necesitan de investigación y desarrollo. Evil Ryu repite movimientos y animaciones, y aunque en el caso de Oni sea original, es una amalgama visual oculta por una buena cantidad de efectos. Probablemente fue el personaje que más esfuerzo requirió, lo que dice mucho acerca de la dificultad que hubo en esta versión. No se incluyeron Trials, tampoco escenarios, nada más que los cuatro personajes.

Todo fue vendido a unos 15 €/$ (no tan caro teniendo en cuenta que los personajes DLC suelen costar 5 €/$), el costo de desarrollo había sido cubierto por la versión arcade cuyo precio era el mismo que el de la primera versión. Es probable que sin la versión arcade del primer Street Fighter IV, la actualización Arcade Edition jamás hubiera visto la luz porque no sería rentable el desarrollo de nuevos personajes más un parche de equilibrio a 15 €/$.

El último punto a tener en cuenta: es imposible añadir personajes en Street Fighter IV sin modificar el motor del juego. El título se codifico originalmente para arcades sin la previsión de recibir actualizaciones, por lo que muchos elementos que permiten el funcionamiento del juego se encuentran en su mismo motor. A diferencia de, por ejemplo, Skullgirls, League of Legends u otro juego, Capcom no tiene otra opción que retocar el motor de juego para añadir contenido, ofreciendo un "todo en uno" como lo hizo en Arcade Edition o publicar paquetes DLC como en Street Fighter X Tekken: no hay más elección.

El costo de los parches en Microsoft y Sony

En cierto sentido esta falta de elección es beneficiosa para Capcom por una razón: parchar un juego es costoso. Se necesitan de al menos 40.000 dólares para actualizar un juego en dos plataformas, como Xbox Live y Playstation Network. Este dinero lo reciben los fabricantes de hardware para el análisis del parche, asegurar que no hayan bugs, reenviar el parche a la compañía para rehacerlo en caso de encontrar bugs, alojarlo en sus propios servidores y distribuirlo a todas las consolas. Esto quiero decir que más allá del dinero que se necesita para el desarrollo, el parche de Arcade Edition 2012 costo al menos 40.000 dólares sólo para ponerlo en línea. Y esto no incluye el parche para PC, aunque Steam sea más barato, pero después de todo debe tenerse en cuenta.

He aquí un matiz interesante: los desarrolladores de software pagan por parches que no aportan contenido, pero reciben descuentos para publicar contenidos en línea, aka DLC. Esto quiere decir que la publicación en línea del parche Arcade Edition 2012 fue menos costosa. Dado que los fabricantes de hardware tienen su parte por las ventas de los DLC, reducen sus costos de publicación en línea para fomentar en los desarrolladores la creación de contenidos descargables. En la misma lógica, a los fabricantes de hardware no les gusta el contenido adicional gratuito, en especial a Microsoft. Esto explica porque los desarrolladores deben pagar por publicar parches gratuitos en línea.

Ultimate Marvel vs Capcom 3 no recibe actualizaciones que corrijan sus bugs por esta misma razón. Más allá de los costos comunes para retocar el motor de juego, se le debe sumar otros miles de dólares más para evitar que un grupo de frikis se aproveche de un bug para hacer un combo infinito extremadamente difícil. ¿Quién pondría miles de dólares en la mesa por algunos jugadores? Nadie. En el caso de Street Fighter IV fue una historia diferente porque casi todo el mundo usaba a Yun y su base era muy grande. Pero lo peor vino con Street Fighter X Tekken, parcheado a mediados de mayo de 2012 para corregir muchos de sus bugs (infinitos, quick combos, etc), para luego volver a parchearse con el lanzamiento de la versión Playstation Vita (con algunas modificaciones extra), y finalmente recibir el parche de la versión 2013. Esto equivale a $ 120.000 dólares por un juego que no alcanzo las 2 millones de unidades. Y también explica el por qué Capcom tiró la toalla.

¿Qué tendrá el parche?

Con toda la información, entramos en la parte especulativa: ¿Cómo será esta nueva actualización? Tomando en consideración que su desarrollo empezó hace poco y que su fecha de salida será antes del verano y otoño del 2013, hay tres resultados posibles: un parche gratuito, un parche a pagar que incluya personajes, o una nueva versión.

El parche gratuito tendría sentido si se considera que la inversión aumente las ventas de Street Fighter IV (algo poco probable y que no siempre funciona) o que sea una operación para apoyar el lanzamiento de un nuevo título como lo fue el caso de Street Fighter X Tekken, que aterrizo en las tiendas tres meses después del parche de Arcade Edition 2012. Un parche gratuito que sólo cambie el equilibrio haría que Capcom de pistas antes del lanzamiento de un nuevo juego que sería presentado, en el mejor caso, en el E3 de este año. ¿Pero lanzar un parche gratuito y no hacer nada por más de un año? Suena como una importante pérdida de dinero y un sospechoso acto de generosidad. O Combofiend, nuevo jefe en juegos lucha de Capcom, sabe persuadir tanto hasta el punto de hacer olvidar a los directivos el costo de los $ 40.000 por la publicación del parche en línea... Y esto sin tener en cuenta el pago al personal por las modificaciones llevadas a cabo, las múltiples sesiones de equilibrio, la corrección de errores en el motor de juego que insumen tiempo y pueden crear nuevos problemas, testeos, etc … En resumen podría ser así.

Un parche a pagar con personajes sería lo más pertinente porque no llevaría mucho tiempo ni sería demasiado costoso. Pero tenemos que pensar en la lógica de los costos de Street Fighter IV demostrada en Arcade Edition. Apostaría fuerte por los cuatro personajes que aparecieron en Street Fighter X Tekken, es decir, Elena, Rolento, Hugo y Poison. Ellos ya fueron desarrollados, no hay que hacer ninguna investigación ni desarrollo, solo adaptarlos al juego. El motor gráfico es el mismo y un hacker logró hacer algo parecido, esta solución parece no costar casi nada y ajustar a los cuatro personajes más un reequilibrio no sería nada difícil. Además evitaría el pago por la publicación en línea a los fabricantes de hardware. Sin trials, sin trajes alternativos, sin opciones extras, quizás algún escenario más, todo a un precio de 20 €/$, siendo el paquete más caro creado con el presupuesto de Street Fighter X Tekken. Sería lo más conveniente. Prefiero esta solución porque también se deberían cubrir los costos por la corrección de Unblockables, Ambiguous Cross-Up y otros bugs que requieren retocar de nuevo el motor de juego, algo inevitable al tener que añadir personajes.

Una nueva versión parece poco probable cuando el anuncio fue a toda prisa. Además se necesitaría añadir material original: nuevos personajes (requiriendo de un nuevo presupuesto, nueva investigación de mercado, etc...), nuevas opciones... Todo esto cuesta demasiado dinero para ser vendido a un puñado de jugadores hardcore que no darían las suficientes ganancias para recuperar la inversión. Una nueva versión en formato físico sería más costosa para su distribución masiva a compradores que no se hicieron con una copia de Arcade Edition y no sería vista con buenos ojos. Esto solo tendría sentido para ocupar un lugar en el ambiente hasta la llegada de un nuevo título, aunque no fuera tan rentable porque actualmente todas las miran prestan su atención en las nuevas consolas.

Conclusión

Hemos visto como Capcom no hace nada sin conseguir algo a cambio, y más cuando es algo económico. Lo que se evidencia en el anuncio es que la compañía reniega de Street Fighter X Tekken, la versión 2013 no aumento las ventas y fue un desastre financiero. Esta nueva actualización de Street Fighter IV no se debe tanto a las demandas de la comunidad de jugadores, ridículamente pequeña, o el amor/respeto que tiene Capcom por sus fans como lo sugieren algunos foros, sino por razones políticas y económicas. Street Fighter IV no tiene mala imagen y es el último juego de lucha donde Capcom puede trabajar tranquilamente. Marvel está atrapado en problemas legales y sus jugadores aún juegan con bugs, Street Fighter X Tekken no produce ganancias y si Darkstalkers sale mañana o el año que viene, es y seguirá siendo un juego de lucha que no conseguirá vender en grandes cantidades.

Si Capcom teme de algo, es al vacío. Este fue el caso cuando la compañía esperó hasta último momento la fecha de salida de King of Fighters XIII para anunciar Arcade Edition, y finalmente lanzar Ultimate Marvel vs Capcom 3 en el mismo mes que el juego de SNK Playmore. Mientras tanto la competencia más directa, NetherRealm, lanzo Injustice: Gods Among Us en Abril y contiene casi todo lo que los jugadores le piden a Capcom desde hace años: entrenamiento online, lectura de la frame data, actualización de contenido ingame, modos multijugador más avanzados y parches de equilibrio gratuitos.

Hay suficientes razones para volver al viejo Street Fighter IV, enmendando los errores de su primo Street Fighter X Tekken, y esperando a la venida de mejores tiempos para crear nuevos títulos en las consolas de nueva generación. Hasta que no haya una fuerte competencia, Capcom hará la vista gorda. Y lo peor es que esto seguirá así.